martes, 28 de febrero de 2012

Clinc, clinc

Buscar habitación es como tener muchas citas a ciegas. Nunca se parecen a la foto, y ya que estás, tienes que quedarte. Tienes poco tiempo para decidir si te gustan y poco tiempo para convencer de que tú les vas a gustar: te vendes (tengo trabajo, no fumo) mientes un poco (soy liiiiimpia y ordenaaaaada) y sueltas a bocajarro las cosas importantes e incómodas (por cierto, tengo novia).
Hay quién ni parpadea, las que te dicen que no les parece mal mientras Marla no pise la casa, y los que, presos de la histeria te sueltan perlas como: "no pasa nada, nuestro compañero de piso es gay. Bueno, es supersecreto y nunca jamás lo confesará, pero yo sé que es maricón. Quiero decir, que somos muy tolerantes en este piso...pero yo soy hetero, eh?"

Pero al final, he encontrado lo que buscaba. Las llaves nuevas hacen clinc clinc en mi bolso. Me cuesta creer que realmente estos son los últimos días que pasaré aquí. Pero sí, es real...¡me mudo! Moving in, moving on.

domingo, 19 de febrero de 2012

Cajas

Clemen y Maya are going north. Se van a vivir a muchos kilómetros de aquí, a un lugar dónde los sueldos son aceptables pero llueve 300 días al año.
Su piso está desmontado en cajas. "Llévate lo que quieras, todo esto de aquí es para tirar". Hurgo entre los trastos y aparecen montones de cosas tan míticas que podría cerrar los ojos y ver a Clemen con ellas. Abuf. No quiero que tires nada de esto. No quiero que os vayáis...
Maldita crisis. Ya no sólo es fuga de cerebros, ni de gente joven. Es que además exportamos al mundo buenas personas.