domingo, 30 de mayo de 2010

Bollowood



En Bollywood, hacen las pelis para ser vistas al modo indio, en proyecciones multitudinarias al aire libre. Los diálogos apenas se oyen, así que no son importantes, por lo que las pelis tienen que ser espectaculares, con unas imágenes que se cuenten solas. La gente come y bebe durante la proyección, y las películas tienen tiempos de silencio después de los puntos culminantes para que el público pueda reaccionar en voz alta: ¡uh! ¡fuera! ¡cuidado! ¡cásate con el chico pobre!

Una remake Bollywood de Room in Rome sería infinitamente mejor. La peli no es mala, es directamente abucheable. Cuando Medem empieza a tomarse demasiado en serio a sí mismo te entran ganas de gritar ¡Pero qué es esta mierda! ¿¡Y esto a que viene!? ¡Que follen y se callen, por favor! Lo único que se salva es la fotografía de la peli (de las actrices no vamos a rajar que las pobres salen en pelotas durante dos horas con una mierda de guión que no les tapa nada). Medem siempre ha sido algo irregular, sus pelis tenían momentos que rayaban la brillantez (sobretodo en lo estético) y otros que eran infumables, pero tanto en Caótica Ana como en Room in Rome los momentos dramático-pretenciosos-ridículos son demasiados y directamente indigeribles.

Es una pena. Algunos diálogos de Lucía y el Sexo, uno de los guiones más vilipendiados de Medem, me parecían buenos. Los de esta peli son malísimos, ya sabemos que la gente dice memeces cuando folla, pero nunca había oído semejante sarta de historias intrascendentes, anodinas, y encima, pretendidamente profundas, merecen ser destripadas en una cena con cerveza, merecen que el público ría a carcajadas en sus momentos más profundos, merecen contestaciones obscenas, merecen a un borracho bailando en la penúltima fila y a las chicas montándose en directo versiones alternativas del film, mucho más cercanas y dignas. Merecen Bollowood.

viernes, 28 de mayo de 2010

Dura jornada laboral

Llevo tres días sustituyendo a la recepcionista de una multinacional de esas con más siglas que un abecedario. Siempre temo decirlas al revés, como no sé lo que significan...Lo mejor de todo es que, en el edificio, en la planta de abajo, hay otra empresa con las mismas letras pero en otro orden.

Cuando llegué a la empresa me enteré de acaban de ser comprados por la competencia, que la sucursal lleva cerrada desde el 17 de mayo, que ya sólo quedan dos empleados allí y que básicamente se dedican a...hacer cajas con cara de pena. Todo lo que hice en mi primer día fue bloquear un ordenador y desbloquearlo (previa llamada al administrador, en Dinamarca...Hi, I'm calling from Barcelona...). El segundo día reservé un restaurante. Ayer...no hice n-a-d-a. Ocho horas tocant-me la figa. (Incluso me planteé pasar a lo literal cuando los dos empleados se fueron a comer durante tres horas, y me dejaron a solas en ese piso del Eixample, con sus sofás de cuero, sus escritorios de caoba, la moqueta silenciadora y las trescientas exuberantes plantas tropicales...pero me corté, seguro que el administrador de sistemas puede verme desde Dinamarca). Ains. Otra oportunidad perdida para un revolcón en un sitio raro.

Pero lo mejor es que esta dura jornada laboral...¡es la sustitución mejor pagada que he hecho nunca! Porque es de jornada completa, y porque se requiere para el puesto un nivel de inglés-avanzado-de-negocios que, obviamente, no tengo. ¿Para qué? Si con quién más he hablado estos días ha sido con las plantas. Ahora empiezo a entender mejor la relación entre sueldo, trabajo y preparación de los políticos.

miércoles, 26 de mayo de 2010

Chesire

‘Well! I’ve often seen a cat without a grin,’ thought Alice; ‘but a grin without a cat! It’s the most curious thing I ever saw in my life!’

La sonrisa del gato de Chesire no desaparece. Él se va, pero su sonrisa queda. Su maldita sonrisa autosuficiente, su silencio burleta, sus acertijos y sus sentencias absurdas, brillando en mi cabeza.

Alicia va a terminar contigo. Ya no te necesito para saber cómo salir de aquí.

viernes, 21 de mayo de 2010

La sangre es sexy



- ¿Te pillo en mal momento?
- ¿Mal momento? Nunca es mal momento para esto. ¿Te apuntas?
- No, gracias.
- ¿Qué te da derecho a decir no a la sangre de la femoral de una buena mujer? ¿Sabes cúal es tu problema, William? Eres un snob, ¡odio los snobs! ¡Tienen almas diminutas, o penes diminutos, o ambas cosas!


La sangre es sexy, las extracciones de sangre son sexis. Eso pensaba yo mientras la enfermera del Banco de Sangre alababa mis venas como si hablara de mis piernas: "Waw, qué buen calibre tienes, la de este brazo es preciosa. Seguro que invierno también funciona de maravilla. ¿Has visto que rápido va? Y sin goma..."
Siento debilidad por las personas capaces de piropear lo inesperado.

miércoles, 19 de mayo de 2010

Salid y divertiros



Estábamos en capilla y tengo que confesar que, aunque no lo supieran, estaba más nerviosa que ellos. Llevo tres años trabajando en esto, era la primera vez que me presentaba delante de más de cien personas y decía: "Sí, yo dirijo a esta panda de terroristas musicales, ¿ a que mola?".

Porque molan. Ya sé que no son el Dream Team, pero tampoco yo soy Johan Cruyff. Se hace lo que se puede, y lo brillante es explotar lo mejor de lo que se tiene. Y mi grupo tiene peculiaridades musicales varias, pero admitámoslo, hay dos cosas en las que son insuperables:
hacer el burro y montar saraos.

Por eso, cuando me los encontré en corro, haciéndose recomendaciones del estilo "no perdamos nuestras posiciones, no desafinemos el puente de la segunda canción, cuidado con gritar, cuidado con perder el compás en el estribillo", me sentí culpable. He sido ambiciosa, y bastante dura con ellos, pero no quería que salieran a su concierto más importante con la cabeza llena de mis manías. Porque entonces, no serían ellos mismos, y este grupo, en sí, es un espectáculo.

Así que San Johan Cruyff vino a mí, y les dije: ¡Ya basta! ¡Salid y divertiros!

Y las señoras de sesenta años saludaron a sus nietos, las mezzos se movieron sistemáticamente al revés, los bajos no dieron ni una nota, a la solista se le quebró la voz, y las contraltos perdieron el compás. Triunfaron. Y yo me sentí tan afortunada.

viernes, 14 de mayo de 2010

Girls Just Wanna Have Fun



A la atención de la Federación de Lesbianas:

Muy señoras mías,

Les escribo en relación a la alarmante conducta de algunas de sus miembras. Sugiero que, de ahora en adelante y con carácter retroactivo, se retire el carné a aquellas que:
- No superen un test de sociopatía básico.
- Repetidamente se vean implicadas en el bollo-drama-rama-mala-ding-dong. Especialmente si son de las que pegan, acosan, engañan y mienten compulsivamente.
- No tengan el carné de conducir relaciones al día. (Como mínimo, la teórica).
Así mismo, propongo que se tomen medidas punitivas contra aquellas que, en el ejercicio de la lesbianidad:
- Cometan mala praxis,
- Superen los límites de la velocidad o bien entorpezcan el tráfico,
- No respeten las claras y evidentes señales de stop.
Para terminar, exhorto a la Federación a proteger aquellas minorías que sufren discriminación y estan en severo riesgo de desaparición: las lesbianas sensatas, las lesbianas de pelo largo (en la cabeza), y las solteras que sólo quieren pasárselo bien.

Muy Atentamente,

Las abajo firmantes, con su fecha de ingreso en la federación.

miércoles, 12 de mayo de 2010

París



- Nunca he ido a París.
- Yo te llevaré. Iremos juntas a París. Prométeme que no irás si no es conmigo.
- Te lo prometo.

Rufus estaba melancólico. Y se me pegó. Mientras cantaba Leaving for Paris, recordé que algunas ciudades estan malditas, que algunos planes estan malditos, y que las maldiciones, en el fondo, molan. ¿Qué emoción tendría, si no, desafiar al destino?

lunes, 10 de mayo de 2010

Ninguna buena acción queda sin castigo



Festival de la Música en la Calle de Vilaseca. Última parada de un finde muy ajetreado. Afortunadamente, la compañía es grata, nos hemos reído como condenadas en el coche, hemos visitado accidentalmente todos los barrios periféricos de las grandes ciudades y hecho el guiri por Cataluña en general. Estamos encerrados en la cafetería, viendo como la lluvia empapa el escenario dónde se supone que deberíamos cantar. Los músicos juegan a cartas y las sopranos se han revelado imbatibles jugando a dardos. Yo sorbo mi enésimo café con la esperanza de que, al entrar hirviendo en mi organismo, me seque los pies de dentro a fuera. Me han colgado del cuello una acreditación que dice "artista". Bromean entre ellos sobre la posibilidad de pedir que nos lo cambien por "pianista en un burdel", por aquello de salvaguardar nuestro honor.

No tengo ganas de socializarme. Es domingo y sigo sin haber resuelto un tema en particular. Después del Diciembre Negro, he desarrollado una especie de hastío interminable hacia ciertos temas y maneras de hacer. Yo antes solía tener más paciencia, más abnegación, más autocontrol. Pero ahora, si alguien me pega esperando que ponga la otra mejilla, lo más probable es que reciba una patada en el culo. Ya sé que la violencia no se cura con más violencia, y que los e-mails desagradables no se contestan siendo más desagradable, pero parece que todos mis trajes de Super Polite Person estan en el cesto para lavar y hace demasiados días que llueve sobre mojado como para poner lavadoras. Así que blablablablablabla..., cada cual por su lado.

viernes, 7 de mayo de 2010

Pin y Pon



No me gusta mi melena de Pin y Pon. Un día de estos me levantaré cruzada, y chas chas, voy a hacerme un corte que ni Mia Farrow en La Semilla del Diablo.

Hoy he ido a un entierro. Me pregunto, en una escala del 1 al 10 como cuanto de inconveniente es pensar en lo buena que está la azafata del tanatorio. Tiene su morbo sexy siniestro. No es culpa mía, la chica tiene los ojos claros y me apuesto lo que sea a que está puesta ahí para eso, para que pienses en otras cosas.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Los diálogos del cine erótico



El viernes se estrena Una habitación en Roma.
Dos lesbianas encerradas en una habitación de hotel.

La iremos a ver diciendo que Medem es un artista, que tiene una sensibilidad femenina sin igual, que esto de una película que transcurre exclusivamente en una habitación es muy posmoderno, que Russian Red es lo más. Desengañémonos: todo esto nos va a molestar para ver lo que queremos ver, ¿desde cuando nos interesan los diálogos en las pelis porno?. Que es primavera, joder, y Elena Anaya me pone, me pone, me pone, aunque no saliera desnuda, aunque no se revolcara con otra mujer en una bañera, aunque recitara la guía telefónica del revés. Y la otra actriz...pues no sé, es rusa.

¿Palomitas?